La aromaterapia es una terapia natural, a base del uso de cantidades de aceites esenciales específicos, altamente concentrados, de potente aroma, no adulterados ni mezclados con otros productos como aceite o agua destilada. La aromaterapia es usada para mejorar los estados de humor, relajar estados ansiosos o estresantes, disminuir la presión arterial y la frecuencia cardíaca, entre muchos otros beneficios.
Esta terapia ya se usaba en China desde el año 4500 a C y los egipcios la usaban para embalsamar a sus muertos y con fines terapéuticos. Los beneficios que ofrece la aromaterapia se pueden obtener mediante la estimulación del olfato.
Nuestro sistema olfativo es un conducto directo a nuestro cerebro, en concreto con nuestra corteza primaria y el sistema límbico, como amígdalas e hipocampo. Esta conexión genera una reacción inmediata en cuanto a la percepción del olor, así como una respuesta emocional; por eso, el uso de los aceites esenciales mediante la aromaterapia puede ayudarnos a sentir mejor.

Pruebas Científicas de los Beneficios de la Aromaterapia
El uso de la aromaterapia está muy extendido. Los estudios que se han realizado con relación a la utilidad de la aromaterapia no han sido concluyentes y se sugiere realizar más investigaciones. Sin embargo, existe evidencia científica convincente sobre algunos compuestos presentes en los aceites esenciales, como son los terpenos; cuando estos se administran por vía tópica o pulmonar ayudan a tratar catarros, bronquitis agudas o sinusitis.
Por ejemplo, el aceite del árbol de té posee propiedades antibacterianas y antimicóticas. Sin embargo, es necesario dejar claro que no todo uso de aceites esenciales se considera aromaterapia.
Algunos Aceites Esenciales Usados en la Aromaterapia y sus Difusores
Aceites cítricos como limón, naranja y flor de azahar generalmente, luego de ser inhalados, mejoran el humor y además disminuyen el estrés y la ansiedad. Estos son resultados de por sí muy ventajosos.
La lavanda se ha ganado en la aromaterapia la reputación de aliada contra la ansiedad y es también purificante, equilibrante y sedante; además, podemos asegurar que todos los buenos olores nos transmiten una sensación muy agradable y esto nos relaja y ayuda a disminuir la ansiedad. Aun así, la aromaterapia puede acompañar y no sustituir el consejo o tratamiento médico necesario cuando se padecen trastornos de estrés o ansiedad.
El aceite de jengibre se usa para favorecer la circulación, es relajante y ayuda a prevenir mareos, nauseas y problemas digestivos; es un gran aliado para tratar gripes y refriados.
Entre los métodos difusores para aplicar los aceites esenciales en la aromaterapia están los difusores a vapor o humificadores; donde se colocan 2 litros de agua y se añaden 30 gotas del aceite esencial elegido. También se puede aplicar la terapia mediante masajes, donde se diluye el aceite esencial escogido en una cantidad adecuada de loción o agua y se procede a masajear suave o enérgicamente, según la dolencia a tratar.
Además, otra manera de aplicar la aromaterapia es a través de baños aromáticos, donde en la tina con agua caliente se coloca una cantidad abundante y proporcionada del aceite seleccionado y al final se da un baño de agua tibia y fría, para estimular la circulación y la relajación.
Contraindicaciones
Los efectos secundarios de la aromaterapia administrada por vía respiratoria son escasos y leves pueden ser nauseas, mareos o dolor de cabeza. El uso oral no se recomienda, pues su ingesta puede ser tóxica o letal; debe tener el aval y control de un profesional. Se deben tomar las precauciones necesarias al aplicar a niños y mujeres embarazadas.
En conclusión, la aromaterapia tiene sus ventajas y contraindicaciones; valorar ambas es lo más adecuado al momento de usar esta o cualquier otra terapia.